Nota publicada en La Voz del Interior, el 09/09/2014
La provincia de Córdoba exhibe un
amplio abanico de posibilidades a la hora de buscar un espacio para participar
en política. Universidades, gremios, partidos políticos y organizaciones no
gubernamentales tienen las puertas abiertas. Pero, claro, en algunas ocasiones,
el verticalismo cierra esas puertas o las abre parcialmente. Pese a ello, hay
una juventud política activa en estas tierras.
Un rasgo a destacar es que, si
bien las juventudes políticas tienen liderazgos, no hay personalismos demasiado
arraigados, ni espacios de poder indisputables.
Sin lugar a dudas, este proceso
va a contramano del fuerte personalismo que atraviesa a la política en general.
La horizontalidad, sobre todo en expresiones de izquierda, es un rasgo digno de
destacar en las expresiones juveniles.
Si les sacamos algunas fotos a
las juventudes políticas de Córdoba con mayor protagonismo y convocatoria,
podemos observar que varias de ellas atraviesan procesos de reflexión internos,
ponen en práctica acciones de formación, discusión y/o están renovando sus
autoridades.
Fotografías
Fotos de la izquierda. El primer
retrato es el de la izquierda: El MST Nueva Izquierda, que rompió con el Frente
Cívico luego de las elecciones legislativas, busca reposicionarse como una
opción renovada, aunque el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) le
recuerde su paso por el juecismo.
Rápido de reflejos, el MST ya
salió a diferenciarse y a instalar la candidatura a legisladora de Luciana
Echevarría.
El FIT, en tanto, habla desde la
legitimidad de la banca de Cintia Frencia y hay pocas señales mutuas de una
confluencia para 2015.
Más allá de las diferencias, las
dos variantes de izquierda militan las calles, se involucran en conflictos
laborales y sientan posiciones comunes, como el rechazo a Monsanto.
Además, en sus prácticas, no
trazan distinciones entre jóvenes y mayores.
Fotos de la Juventud Radical. En
la primera, aparece Pablo Villalón (oriundo de Laguna Larga), el flamante
presidente del Comité Provincia. Esta imagen indica que la Juventud Radical le
puso pausa al internismo partidario y que sigue eligiendo referentes del
interior para ocupar ese espacio.
En el segundo retrato, aparecen
Omar Flores y Agustín Torres (presidente y vicepresidente salientes del Comité
Capital). Tienen en mano un interesante proyecto que presentaron en el Concejo
Deliberante y que pone a los estudiantes secundarios en el rol de concejales.
La iniciativa, que busca fomentar la participación, tiene estado parlamentario.
Foto de Unidos y Organizados. En
Córdoba, tienen tantas fotos como espacios políticos: las variantes juveniles
del kirchnerismo están en un importante proceso de reflexión interna tras la
renuncia de Carolina Scotto, quien había logrado aglutinar fuerzas.
Esta herida fue el puntapié
inicial para la búsqueda de nuevos liderazgos, aunque los jóvenes nacionales y
populares tengan la cabeza puesta en el orden nacional, porque les preocupa la
sucesión de la presidenta Cristina Fernández.
Kolina, La Jauretche, La Cámpora,
Movimiento Evita, Nuevo Encuentro, Movimiento Peronista Auténtico “Néstor
Kirchner”, Partido de la Victoria y La Bisagra posan, repartidos, en estas
imaginarias fotos, con Florencio Randazzo, Daniel Scioli, Aníbal Fernández,
Jorge Taiana y Agustín Rossi.
Foto del Frente Cívico. En este
retrato, aparece la fachada de la flamante Escuela de Gobierno y Participación
Ciudadana recientemente inaugurada.
Mientras los mayores están a la
espera de las definiciones del omnipresente Luis Juez, los jóvenes del Frente
Cívico quieren dotar de contenido a esa fachada y se ocupan de edificar a
través de la doctrina a 500 militantes de la Capital y del interior.
El senador Juez vio con buenos
ojos el lanzamiento de la escuela y hasta filmó un video de acompañamiento.
Foto de Unión por Córdoba. Es la
foto de La Militante, una agrupación con despliegue territorial en toda la
provincia. Si bien el liderazgo indiscutido pasa por Franco Miranda (presidente
de la Agencia Córdoba Joven), María Laura Labat, Edgar Bruno y Claudio Fueyo
asoman la cabeza y tienen algún grado de llegada al despacho laberíntico de la
vieja casona de la Agencia.
Por estos días, además de estar
abocados en la gestión provincial, los jóvenes de La Militante acompañan a
Adriana Nazario (esposa del gobernador José Manuel de la Sota) en la
articulación del Plan de Desarrollo del Noroeste y empiezan a ensayar una
eventual precandidatura a gobernadora de la titular de la Fundación Banco de
Córdoba.
Foto del PRO. El retrato de los
Jóvenes PRO de Córdoba tiene en primer plano a Francisco Losano y a Gonzalo
Gastón Torres, flamantes presidente y vicepresidente de la junta ejecutiva
provincial recientemente puesta en funciones, que busca dar los primeros pasos
en una estrategia unificada y como soporte de contención.
Los jóvenes referenciados en
Mauricio Macri a nivel nacional se forman en liderazgo, comunicación política y
reciben el estímulo de los dirigentes mayores de todo el país.
Discutir una agenda de políticas
públicas
Cada una de las fotos imaginarias
de este álbum nos muestra que las juventudes partidarias de Córdoba están en
movimiento. Los jóvenes, además, participan en forma activa en universidades,
colegios y organizaciones del tercer sector, que funcionan como espacios de
articulación de sus demandas. Inclusive, en muchas ocasiones responden antes
que los propios partidos.
A poco más de un año del nuevo
proceso electoral, los dirigentes políticos pueden optar por convocar a la
juventud para que ocupe el lugar de engranaje proselitista o para debatir con
ellos una agenda de políticas públicas destinada a responder a sus necesidades,
inquietudes e intereses.
Tal vez, desde la apertura y la
inclusión e impulsando un verdadero debate colectivo en el cual estén
representados todos los sectores juveniles de la sociedad se puede empezar a
buscar los consensos necesarios para debatir en Córdoba una Ley Provincial de
Juventudes, como ocurre en estos momentos en la provincia de Santa Fe.
Ningún dirigente político
desconoce que alrededor del 35 por ciento del padrón electoral está compuesto
por jóvenes.
Ese dato de la realidad puede ser
utilizado como un simple anzuelo para captar voluntades y traccionar votos a
través de encendidos discursos, o como puntapié para impulsar políticas que
atiendan a resolver problemas de vivienda, trabajo, salud, educación y
adicciones de un número importante de ciudadanos.
Eso sí, con la juventud en
espacios reales de poder y dándole la oportunidad de ocupar lugares expectables
en las listas de candidatos.
*Titular de Juventud Partidaria,
comunicador y estudiante del doctorado en Ciencia Política CEA-UNC
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